La naturaleza inspira.

Oh! cuan distinto, hermoso Teide helado,

te veo y vi, me ves ahora y viste!

Cubierto en risa estás cuando yo triste,

y cuando estaba alegre, tú abrasado.

Tu mudas galas como el tiempo airado,

mi pecho a las mudanzas se resiste,

yo me voy, tu te quedas, y consiste

tu gloria en esto y la crueldad de mi hado.

¡Dichoso tu, pues mudas por instantes

los afectos! ¡Oh quién hacer pudiera

que fuéramos en esto semejantes!

Para ti llegará la primavera

y a ser otoño volverás como antes,

mas yo no seré ya la que antes era.

Los amantes de la fotografía y de la literatura, de la naturaleza y de las personas, de la comunicación, todos están printpostando estos días con alegría. Se ve que el contacto con la naturaleza y con las gentes dan ganas de disparar la cámara y hacérle llegar en mano al destinatario elegido, los sentimientos. Una imagen que nos llega, para que la publiquemos nos toca muy de cerca, se trata del pico Teide (Tenerife, Islas Canarias), visto desde la isla de Gran Canaria. Es espectacular, esta montaña es muy alta, y parece ser que se ve mejor desde otras islas que desde ella misma, dada su altitud.

Ya en el siglo XVIII, semejante monumento natural fue glosado en una pieza titulada «Soneto al Teide», del humanista canario Cristóbal del Hoyo Solórzano, Vizconde del Paso, y que reproducimos junto a la foto del anverso de la postal.

Dejamos la poesía, y les dejamos con anversos, otros que nos han remitido con distintos mensajes para su publicación, la verdad, rincones y momentos maravillosos, ¡tantos como personas!